La poeta y crítica literaria Wislawa Szymborska, fallecida el 1 de febrero en Cracovia y en cuya creación son temas recurrentes la memoria, la belleza y la condición humana, nació en Kornik, en la región de Poznan, el 2 de julio de 1923.
Szymborska, que a los ocho años se trasladó a Cracovia, se incorporó muy pronto al mundo literario de esta ciudad del sur de Polonia, para dedicarse por entero a la poesía.
Se había licenciado en Filosofía Polaca y en Sociología por la Universidad Jagelloniana de Cracovia y trabajó desde 1953 hasta 1981 como crítica en la revista "Zycie Literackie" ("Vida Literaria"), con la columna "Lectura no obligatoria". En cuanto a su propia obra, Szymborska debutó en 1945 con el libro "Busco las palabras"; en 1952 editó el poemario "Por eso vivimos" y posteriormente publicaría "Preguntas planteadas a una misma", en 1954, entre otras obras.
Sus obras representan las cumbres más altas de la poesía polaca contemporánea, junto a la de Czeslaw Milosz (que fue premio Nobel en 1980), Tadeusz Rozewicz y Zbigniew Herbert.
Se llegó a describir a Szymborska como la "Mozart de la poesía", dada su abundante inspiración y la maestría con que usaba las palabras.
Wislava Szymborska escribió una poesía reflexiva y moralizante, intimista, irónica y llena de paradojas, eligiendo siempre palabras "sencillas y claras", frecuentemente coloquiales.
Sus obras han sido escasamente traducidas al español, en México antes que en otros países: en las revistas mexicanas "Plural", "Proceso" y "La Semana de Bellas Artes" y en varias antologías de los años setenta y ochenta.
Wislava Szymborska estaba en posesión del premio de Literatura de Cracovia (1954) y del Premio del Ministerio de Cultura de Polonia (1963). También ganó el premio Z. Kalenbach de la Fundación Koscielskich de Suiza, el Premio Goethe en 1991, el Premio Herder en 1995 y el del PEN Club polaco el 30 de septiembre de 1996.
El 3 de octubre de 1996 fue galardonada con el Nobel de Literatura 1996 por "la precisión irónica con la que ha iluminado fragmentos de la realidad humana en su contexto histórico e ideológico". El premio le fue entregado en Estocolmo el 10 de diciembre de 1996 por el rey Gustavo de Suecia.
Szymborska era una escritora discreta, tímida, retraída, que vivió alejada de los organismos institucionales y de los congresos de escritores de Polonia. (Información de la Agencia EFE)
Me da mucha pena que haya fallecido la poeta Wislawa Szymborska. Era una poeta extraordinaria, ya que también en el cole, una de las cosas que hemos hecho sobre ella es: apuntar algo importante que ha hecho en su vida, en el cuaderno de "noticias con nombres propios". Yo y mucha gente creemos que Wislawa Szymborska ha sido importante en este mundo.
ResponderEliminarAlba Doya
Para poder tener vida eterna basta con publicar un libro durante la vida, ser amable y saber distinguir entre lo que es bueno y lo fácil para que así uno pueda dormir tranquilamente y para siempre.
ResponderEliminarCuando uno publica un libro, el autor nunca morirá siempre y cuando su obra sea conocida y leída, con dos personas que lo lean serán más que suficientes y así éste no será olvidado.
Con Symborska así ha sucedido, sus poemas y su gran bibliografía magistral nunca será olvidada, sobre todo en su país natal. Yo apenas la estoy empezando a conocer pero me encanta sus estilo tan único como el de Pablo Neruda, Octavio Paz, Armando Nervo y Juan Rulfo y le comentaré a mi familia sobre ella, a mis sobrinos sobre todo para que sepan ser sensibles desde pequeños y qué mejor ejemplo que Symborska.