Tras varios días en los que el profesorado y el alumnado hemos estado hablando y trabajando sobre la necesidad de ser tolerantes, comprensivos, dialogantes y buena gente, esta tarde hemos salido al patio, hemos unido las manos y hemos escuchado un manifiesto y cantado una canción…
Desde la biblioteca, como ya pudisteis leer en un
post anterior, se facilitaron más de cuarenta libros para que, a través de la
lectura, reflexionáramos sobre nuestro comportamiento y nuestras actitudes,
viendo las de los protagonistas de los libros: la sabiduría de Fabián para
acabar con una guerra que ya nadie sabía por qué había empezado; el afán
desmedido de Avalancha, vencido por la voz sosegada de una muchacha que lo
quiere como amigo, no como invasor; la determinación para salvar los libros de
la Bibliotecaria de Bagdad; la inocencia de Rosa Blanca, volcada en ayudar a
otros como ella, sin saber el riesgo que corría; la mala uva del protagonista
de El Señor de los enredos que sus intrigas consigue enemistar a las distintas
partes de un árbol… La literatura siempre es un espejo donde mirarnos; por eso
es tan recomendable leer y sobre todo, leer buenos libros.
Los chicos y chicas de sexto han elaborado el
manifiesto y, entre otras cosas decían que…
“.. La paz es el conjunto de las
alegrías que hay en el mundo.
.. La paz es un mundo sin guerras,
sin armas, sin maltratadores, sin gritos, sin riñas y sin injusticias.
.. La paz es como un árbol al que se
planta, se riega y se le da cariño hasta que se llena de flores y le crecen los
frutos.”
y terminaba con este deseo:
“Esperamos que, cuando llegue esta
próxima primavera, florezcan no solo los árboles y las plantas; esperamos que
también florezca en nuestros corazones la rosa blanca del entendimiento, de la
comprensión, de la cooperación, de la compasión, del amor y de la paz.”
Teniendo en cuenta que la guerra es un negocio de
enormes proporciones, conseguir la paz en el mundo es una de las más viejas y
permanentes utopías, pero está bien que reflexionemos de vez en cuando sobre
nuestra predisposición personal para ser agentes activos de concordia y
entendimiento con las personas que habitan a nuestro alrededor.
Me gusta mucho el día de la paz. Aunque a veces en nuestro colegio, siempre hay alguno que se pelea. Este año ha estado bien. Algunos compañeros como en las fotos se demuestran, dijeron unas cuantas frases, y luego bailamos y cantamos. Fue divertido, je,je. Sobre todo cuando Mariano se puso a bailar con su movimiento... Me parece un día bonito para no pelearse y pasárselo bien.
ResponderEliminarAlba Doya
Me ha gustado mucho celebrar el día de la PAZ y la NO VIOLENCIA. Todos hicimos unos grandes corros. Estuvimos haciendo una mano para ponerla en el pecho. Y con esa mano estuvimos cantando y bailando una canción. Pero antes tres compañeros leían un pregón sobre la Paz, que habíamos realizado los niños y niñas de sexto. Antes de celebrar este día Mariano nos leyó algunos libros de la maleta de la Paz.
ResponderEliminarMónica Satorres